Pues llega el momento de la refexion, dado que es evidente que mi equipo está lejos de tener la calidad necesaria.
En mi opinión, se es competitivo cuando con un par de predicciones a favor puedes ganar al 90% de los equipos a domicilio, aun a menor esfuerzo, y en casa la victoria debería caer a igualdad de aciertos/fallos estratégicos, salvo contra los dos o tres top. Esta temporada no se da ni lo uno ni lo otro (salvo la victoria de la primera jornada), a pesar de una notable regularidad en el acierto de planteamientos.
Ahora viene el dilema: siempre pensé que el día que cayera lo haría con las botas puestas, es decir, luchando hasta el final, pero también me comprometí a no jugar si no me divertía, con lo cual, puesto que sin opciones de ganar no hay diversión, no sé qué voy a hacer...todavía.
Lo pensaré, pero huele a última temporada.
Sólo quería compartir mi reflexión con vosotros.
Saludos