Era un ocho de enero, acababa de aterrizar en un nuevo club y se enfrentaba a un antiguo equipo en el que se había estado formando temporadas atrás. Defendiéndolo su antiguo compañero Ibon.
En un minuto ya estaba Hayden de vuelta en el vestuario.
(118263313)Dos temporadas después jugando los dos de suplentes, se acaban encontrando de nuevo y el que cogía el camino del vestuario esta vez era Ibon.
(119612894)Seguro que cuando acabó el partido, tuvieron un ratito para encontrarse, tomarse unas cañas cervezas en el bar del Sant Quirze y recordar batallitas de temporadas atrás.
De tanto que te quiero, te aboñego, que decían por ahí.