Pues hasta aquí llega la cosa, la naranja no da más zumo. En el partido de hoy lo esperé por fuera, pero aunque le hubiese clavado y ganado, nada hubiera cambiado, son demasiadas bajadas, hasta el punto que ahora mismo creo que soy el peor equipo de la liga exceptuando a Wild Pride y quizás algún otro. El Steen (una bestia) y lo que quedaba de Echegoyen y los exteriores me han dado un plus la temporada pasada, pero han seguido cayendo y ya no valen para seguir compitiendo en ACBB, así que esta temporada ya es la última.
La única estrategia que llevaba en B3 era aprovechar las taquillas que tenía en liga, que estaban siendo muy fuertes (algunas de 630k y 620k he llegado a tener), para ahorrar con sueldos sostenidos y cambiar piezas justo antes de los cruces, entreno de forma mediante. Partiendo de 300k había conseguido juntar 1,5M, que vendiendo los dos interiores malos quizás hubiesen sido 3M para fichar un interior fuerte y viejo de 33-34 para lo que queda de año, pero igualmente no hubiera sido suficiente. A un partido quizás hubiera podido clavar a alguno, pero competiciones largas con muchos cruces... no hubiera funcionado.
He cometido muchos errores en la gestión de la plantilla, ascendí un poco de rebote y en ningún momento tuve un equipo dominante, tenía que haberme contenido, vender a Echegoyen (entonces bien vendible) y afilar el cuchillo mientras ahorraba, pero esa primera liga regular en la que cacé todos esos partidos fuera de casa me hizo lanzarme a por ella... y el resto es historia. intenté equilibrar, fichando interiores burros sin secundarias para POs, utilizando tácticas extremas a lo último como poner a Echegoyen (rebotes7) en los partidos decisivos de 4 metiendo a una BL en el 5 con un rebotes19 sin secundarias fichado para la ocasión + José Vicente Madrid, que con su DE12 además podía aguantar algunos minutos de sub4, perdiendo en esos minutos mucho tiro pero ganando algo de rebote, y con eso y la petada de resistencia que llevaban mis exteriores (tras reconvertir un base con TI16 en alero) pude seguir moviendo un equipo que ya estaba en caída libre y llevarme esa liga regular contra Fab y Fanega, que luego me dio el cancha, y al final ese cancha significó una liga, aunque fuera por un solo punto.
Pero ya no se puede exprimir más la cosa. Una pena porque el juego es realmente divertido, pero hay que saber decir adiós. Competiré lo que queda gastando hasta el último céntimo y después diré hasta siempre, y si no es un hasta siempre, hasta dentro de un montón de años seguro.