...sobre todo cuando es políticamente incorrecto.
Agradezco la valoración positiva.
Sin ponerme tan abuelo ni tan cebolleto como Mick, me gustaría recordar una anécdota que relaciono con esto:
Era una noche de sábado como cualquier otra en el mes de Septiembre; había salido a calentar un “hoy de tranquis” con unos amigos y, como suele pasar en estas situaciones, a las 3 de la mañana nos planteamos dar un paso más allá y prolongar el evento haciendo acto de presencia en alguna discoteca. Por cuestiones climáticas, el estilismo del momento no se correspondía con el principesco estatus que los literatos porteros de discoteca de Madrid esperan de un pene, de modo que, pese a la hora y visto que enseñar una teta no serviría de ayuda (seguramente empeoraría la situación), pusimos rumbo al que por entonces era mi habitáculo, que compartía con mi abuela. La finalidad era tan absurda como necesaria: cambiar unas bermudas por un pantalón largo.
Quiso el destino o mi atolondramiento supino, que ese día me dejara las llaves en casa, obligándonos a ofrecer un concierto de telefonillo de una hora aproximadamente (ojo… gratis).
Al subir, esperándonos en el umbral: mi abuela en batín con cara de: “Me sentaré en la puerta de mi casa a ver pasar el cadáver de mi enemigo” (proverbio árabe).
Lo primero que dijo al vernos en un estado tan deleznable:
¿Queréis un par de huevos?Mis amigos, a excepción de un diabético tipo 2 en potencia, enseguida rechazaron la aparentemente cordial, aunque intempestiva oferta (al suculento le dije que esperara fuera), pero en mi retorcida mente se empezó a fraguar una duda que aún a día de hoy, con la susodicha gobernando de la mano de Belial alguno de los siete círculos, me tortura.
He aquí el quid de la cuestión:
¿Fue políticamente correcta, gramaticalmente incorrecta, simplemente amable... o su ofrecimiento iba más allá?
¿Fue una vil y perniciosa amenaza pura y exclusivamente carnal?
En tal caso mi concepción de genealogía saltaba por los aires… Aunque visto que la virgen no era tan virgen, lo mismo mi madre había nacido por gemación.
Sea como fuere, lo que vengo a exponer con toda esta parafernalia, es que la magia de lo políticamente incorrecto reside a veces en la interpretación. Como en el arte.
Last edited by Permutado at 05/25/2023 08:51:17